miércoles, 16 de marzo de 2011

Via Crucis de Huelva 2011

La lluvia cedió en sus pretensiones y permitió que el Vía Crucis del Consejo de Hermandades y Cofradías pudiera realizarse el pasado Lunes. El Señor Cautivo fue el titular que presidió el piadoso acto, lo que ha supuesto todo un acontecimiento para su hermandad que está celebrando su 25 Aniversario desde que es hermandad de penitencia.

La parroquia de Nuestra Señora del Pilar abrió sus puertas justo a las 20:30. En su interior, el párroco Víctor Bermúdez conminaba a los allí presentes a considerar los sufrimientos de Cristo: "Jesús nos da la mayor prueba de su amor en que murió por nosotros".

Con un protocolo que abría la cruz de guía, el cortejo inició su recorrido en el que había por delante 15 estaciones, una más de lo habitual. La razón estaba en la admisión del Resucitado dentro de las cofradías de Semana Santa y bajo previa autorización del Obispado.
 
En cada estación aguardaba al cortejo, tres hermanos del Cautivo provistos de una cruz y dos cirios. El Señor Cautivo iba llevado principalmente, por hermanos de esta cofradía dirigidos por Manuel Gómez 'Carnicerito'. La imagen llevaba su túnica morada habitual de salida de Lunes Santo y el exorno floral estaba compuesto por claveles rojos y lilas, iris azules, calas blancas y brezo morado, trabajo de José Manuel Escobar.

La comitiva incluía una representación de varias hermandades de la provincia que tienen como titular al Cautivo: Trigueros, Bollullos, Corrales y La Palma que iban al principio de la comitiva. Seguidamente, representantes de todas las hermandades de penitencia de la capital -tres por cada una-, el guión de la Hermandad del Cautivo, miembros del Consejo
de Hermandades y Cofradías, junto al obispo de la Diócesis, monseñor José Vilaplana; el secretario de hermandades, Diego Capado; el hermano mayor del Cautivo, Antonio Infantes y el párroco del Pilar. También se integró a la comitiva, la superiora de la residencia Santa Teresa Jornet, sor Modesta. Justo delante de la imagen titular, el Trío Oboe Gólgota que interpretó música sacra durante todo el recorrido. Como era de esperar, uno de los momentos de mayor intensidad fue la llegada del Vía Crucis a la residencia de ancianos, donde esperaban las religiosas. La relación entre el Cautivo y este lugar asistencial viene de lejos y la visita que el titular de La Hispanidad realiza al asilo cada Lunes Santo se ha convertido en una de las imágenes mas esperadas de la Semana Mayor onubense. A las 22:00, el Señor Cautivo regresó a la parroquia, mientras que la décimo quinta estación fue rezada por monseñor Vilaplana ante el Señor Resucitado en el interior del templo.
 

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